¿Te haz preguntado qué es la democracia…o mejor aún cómo se ejerce, no sólo en México si no a nivel mundial? Muchos líderes han conceptualizado “democracia” como un ideal y no como una forma de vida; sin embargo estamos en camino y algún día podremos concebirla así. El gobierno del pueblo, significado literal, ha permitido que por medio de elecciones directas o indirectas la ciudadanía elija a las principales autoridades y de este modo es el pueblo, quien puede cambiar a estas mismas autoridades al no cumplir con las famosas promesas de campaña o alguna arbitrariedad durante su dirigencia.
En México será en el 2012 cuando volvamos a ser partícipes al decidir cuál partido y candidato presida durante seis años. Históricamente hemos vivido el mandato de dos partidos políticos en México. El PRI que gobernó a México por 71 años ininterrumpidos en la Presidencia de la República; y el PAN que actualmente está en la presidencia. A través del tiempo se han conformado partidos políticos con ideologías centro, derecha o izquierda, teniendo como resultado a siete, los dos antes mencionados más PRD, PT, PVEM, Convergencia y PANAL, registrado en 2005 ante el IFE.
Caso ajeno, el 11 de septiembre de este año se llevaran a cabo comicios en Guatemala para elegir Presidente, diputados y alcaldes. En este país existen 25 partidos políticos que estarán en la contienda electoral; no obstante, su radiografía sociopolítica es muy contrastante ya que cuenta con 40% de analfabetos y un 50% de niños en estado de desnutrición y se vive un creciente empobrecimiento aunado al incremento de la violencia cuyo promedio es de 19 asesinatos diarios.
También es preciso comentar que dentro de los candidatos a la presidencia fue polémico el caso de Sandra Torres, quien es la ex esposa del presidente Álvaro Colom y cuyo registro fue rechazado por todas las instancias en aquel país ya que se le acusó de cometer "fraude de ley"; ella se divorció en abril pasado del presidente Álvaro Colom, precisamente para no comer delito alguno ante la norma constitucional que prohíbe a los familiares cercanos del gobernante de turno optar al cargo, por lo cual ella demandó ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos al Estado de Guatemala por violar sus derechos humanos.
¿Para ti es extraño o cotidiano encontrar en México este tipo de casos catalogados como “fraude de ley”? No tenemos un esquema social como en el caso de Guatemala, entonces podemos ejercer con toda claridad la democracia, elegir o destituir a nuestros dirigentes.
Diana Camacho