martes, 8 de febrero de 2011

El año que comienza…

   Quedó atrás el  2010,  el famoso “Año del bicentenario”, en el cual celebramos la independencia de nuestro país y el centenario de la Revolución mexicana, hablamos durante un año de figuras importantes como: Miguel Hidalgo, Emiliano Zapata, José Ma. Morelos entre muchos más personajes que con su liderazgo lograron hacer de nuestro país una nación cimentada.
   Inicia el 2011 ahora con nuevos temas en los medios de comunicación, tales como el aumento de precios a productos de  la canasta básica, los kilos que dejó de más las épocas decembrinas, el incremento a la gasolina, la culpabilidad o no de Kalimba, entre otros. Algunos de ellos no son nuevos si no producto de la publicidad;  sin embargo, sí son temas de contraste con los percibidos en el 2010, donde demostrábamos al mundo que México es un país unido, lleno de Historia y con una enorme cultura. Comienza el 2011 con una frase: “Elecciones presidenciales”; al día de hoy, vemos a los partidos políticos en disputa de la ambiciosa elección, la que abandera el Estado de México con un mayor número de votantes y conocido como: “el laboratorio político”. Sin embargo también vemos al Partido Acción Nacional (PAN) con una estrategia muy silenciosa, sin dar nombres y manteniéndose al margen del tema. Por otro lado tenemos a los de izquierda principalmente al Partido de la Revolución Democrática (PRD, como un partido que se siente con gran empuje después de las elecciones ganadas en el estado de Guerrero.
   Actualmente, en nuestro país se está malgastando el objetivo de lo que es un partido político, al que se define de acuerdo al filósofo político francés Augusto Burdeau, como: “Una asociación política dotada de orden cuyo fin es formalizar y dar eficacia a un poder de hecho” esta enunciación nos hace cuestionarnos ¿En verdad juegan este papel los partidos políticos en nuestro país? ¿Cuál es el verdadero fin de la política en México? Sé que las respuestas que especulaste no son las más apegadas con lo que define Augusto Burdeau.
   El compromiso de crear personas ordenadas no solo es de partidos políticos y/o organizaciones, como sociedad debemos concienciar a ser ordenados y responsables de nuestras propias acciones. Muchas veces delegamos nuestros problemas a terceras personas como por citar alguno la famosa Escuela “Es que en la escuela no los educan bien” o en otro de los casos “Los de limpieza tienen muy sucia la ciudad” en lugar de criticar y solo señalar por que no jugar una responsabilidad compartida; en el primer caso no es la escuela quien educara a tu hijo(a) si no eres tú a través de tus valores y ejemplo quien lo hará. De igual el famoso caso de limpieza, el cual delegamos la responsabilidad de mantener limpia a la ciudad a un grupo de personas, cuando es de cada uno el compromiso de colocar la basura que se genera y lo más importante depositarla en el lugar indicado.
   El 2011 ya está en marcha con muchos temas políticos, sociales y económicos; sin embargo, el ser mejores cada día está en cada uno de nosotros, a través de la tolerancia, la comunicación, el amor, pero sobre todo el respeto hacia nosotros mismos, porque cuando nos respetamos podemos respetar a los demás. Este año más que discursos políticas y propuestas de candidatos, veamos lo que podemos hacer en cada uno de nuestros hogares, los valores que podemos inculcar para tener una sociedad con calidad, lo más importante no es tener políticos de calidad, si no crear ciudadanos responsables para elegir políticos con sentido humano.

Aldo Vázquez.

3 comentarios:

  1. Completamente de acuerdo contigo Aldo, Todos somos fuente y el cambio está en nosotros, empecemos por cambiar desde adentro, si no queremos calles sucias pues no hay que tirar basura, si no queremos políticos rateros empecemos por no robarnos ni el cable, comprar piratería, etc. Hagámonos responsables, comprometidos, honestos, limpios, y hacer conciencia en otros para seguir con esta cadena.

    Si no cambiamos nosotros, no cambiaremos nada.

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  2. Para cambiar nuestro entorno primero debemos cambiar nosotros, podemos comenzar por brindarle una sonrisa a los demás, o simplemente un “Buenos días”.

    Les dejo esta reflexión y les deseo un excelente día.

    Un día comencé queriendo cambiar al mundo y comencé por intentarlo. Al cabo de un tiempo me di cuenta que me era imposible, por lo que pensé mejor en cambiar a mi nación.
    Después de intentarlo me di cuenta que no pude, por lo que decidí cambiar a mi comunidad. Después de un tiempo de intentarlo no pude, por lo que decidí cambiar a mi familia.
    Pero al cabo de un tiempo me di cuenta que no pude y ahora en mi lecho de muerte he llegado a la conclusión de que debí de haber cambiado yo primero, ya que de esa manera y con mi ejemplo mi familia cambiaría, a su vez mi familia con su ejemplo cambiaría a mi comunidad, la cual cambiaría a mi nación, la cual lograría cambiar por fin al mundo.

    El cambio se hace día a día, no pretendamos querer cambiar a las personas ni decirles que es lo correcto, la mejor forma de hacerlo es con el ejemplo.

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